Quiero

Quiero que radiante sonrías
quiero que a diario te rías
quiero que siempre sueñes
quiero que ahora anheles
quiero que intensamente vivas
quiero que profundamente sientas
quiero que hagas tu fantasía
quiero que ames cada día
quiero que quieras a toda hora
tanto como yo te quiero ahora.

Qué busco; dime

Qué busco; dime

A Daniela Z.
con gran aprecio, cariño y a...

"Volverán del amor en tus oídos

las palabras ardientes a sonar,

tu corazón de su profundo sueño

tal vez despertará..."
XVIII, Bécquer.

Mi poesía busca alegrarte la vida
e iluminarte la tarde, la noche y el día,
quiero que por mis palabras te des cuenta
que el amor en tu corazón dormido anida;

y urgente, debe bellamente explotar,
y de la más sublime forma salir a volar
para que sea parte permanente de tu vida,
para que en todo segundo y momento

tengas una sonrisa en el rostro y en el alma,
que para ti la tormenta sea sólo una brisa,
y que tus sueños suban a la más alta cornisa
y vuelen más allá del cielo que ahora está en calma.

Para que al momento de poderme abrazar
sientas que eres un sol y que mis brazos
están alrededor tuyo como brillantes astros,
y que a tu corazón lo sienten palpitar.

Pero no sólo te brindo mi poesía
sino también mi espíritu y todo mi ser
para que vivas con inmensa felicidad día a día
y junto a mi siempre quieras alegre amanecer.

Y nuestros cuerpos hacen de los latidos sólo uno
y ahora que nos miramos tan, tan cerca
y estamos frente a frente, cada vez más cerca,
dime, ¿qué sería lo más oportuno?

Sonrisa

-¿Qué es la oscuridad?- exclamó el hombre, antes de morir.
Y realmente no sabía que era, o no lo recordaba,
pues hubo una sonrisa -la de su amada-,
que le iluminó hasta el momento de su partida,
hasta el último segundo de su vida.

Juntos

¿Quién los ve andar por la ciudad

si todos están ciegos?

Cortázar.

El sol, encima del horizonte ya no arde,
sino que deja un cálido abrazo sobre ti,
tan cálido como nuestros corazones
o los besos apasionados que pides de mi.

La tierra sobre la que reposan
nuestros cuerpos por el amor agitados,
es la misma que mañana admirará
lo mucho que estamos enamorados.

La luna, que pronto está por salir
para hacer desaparecer la oscuridad,
nos arrullará con su luz y blancura,
para que nos amemos toda la eternidad.

Y la eternidad... que no viviremos
-a menos que nos olvidemos qué es el tiempo-
será la encargada de hacernos delirar,
y que nuestros besos maten al tiempo.

Morirán los cuerpos, y no sabremos
qué vendrá después de estar muertos.
Pero si sabemos que estamos juntos,
y que nos deseamos, dormidos o despiertos.

Guerra de vapores

El viento sopla fuertemente a esta hora. En pocos minutos se esconderá y dejará de brillar el sol, para abrirle paso a la luna y que ésta sea ahora la protagonista. Mientras tanto, en el cielo se libra una batalla entre las nubes. Nubes blancas. Nubles negras.

Pareciera que no se mueven; por eso, hay que prestarles completa atención. Me quedo contemplando la guerra que se libra encima mío. Ninguna de las nubes se quiere dispersar, no se quieren rendir, ni desaparecer, y por ahora, tampoco quieren llover; sólo quieren luchar por ver cuál de ellas dos, se quedará en esta tarde y en esta noche con el cielo. Quieren que hombres como yo o como otro, nos quedemos admirándolas y enamorándonos perdidamente de ellas.

Delirio II

Delirio II

2  de mayo 2012

"...que el alma que hablar puede con los ojos
también puede besar con la mirada." 

G. A. Bécquer

* Delirio I

Cantan soles, cantan lunas

para que no mueran las fantasías.

Entre bosques, entre dunas,

durante tardes, noches y días.

Y ese canto recorre cuerpos

tanto de vivos como de muertos

Y muere cuando no llegan vientos, 

y así, se multiplican los lamentos.

Debajo del agua, entre las nubes.

Entre mi mente y tu corazón;

por allí viajan esos cantos, puedes

sentirlo, tanto que pierdes la razón.

Y junto a esos cantos vienen mis cantos

que son proclamados en silencio.

A escucharlos y sentirlos

dulcemente te sentencio.

Por lo menos hasta que yo desaparezca,

el aire deje de existir

o las letras dejen de decir

hasta que tu alma ya no enflorezca. 

Me callo y así te canto

pero te escribo y así te digo:

Te quiero, no sabes cuánto.

Delirio I

Delirio I

"

2 de Mayo 2012.

Una gota de sudor en tu mejilla
refleja el eco de los mares;
y allí me veo, curvo como un recuerdo
que ha sido distorsionado con el tiempo.


Una lagrima recorre tu cara,
y aparece un río que arrasa
con casas, bosques y cielos,
y deja escombros y rotos anhelos.


Un rojo profundo como la sangre
veo derramado sobre la tierra.
Han muerto miles y han sido olvidados
Como este Poema, dentro de dos mil años.


Y no importa cuánto grites,
ni importa cuando ayudes
pues en este mundo sobrevive
hasta el humano más basura.


Y morimos todos en vida
esperando una salida,
pero nos llegan emboscadas
que nos rebasan y nos ganan.


Quedamos tendidos sin fuerza,
y la luna nos arrulla sin destreza.
Pero tu sigues ahí:
Inexistente como la nada


Y mi canto no se calla
Y mi alma solo cae
Entre cielos rojos y verdes


Que se alzan contra los vivos
y nos cubren la cabeza
Y mi poema se desangra...


como el hombre.
Y te amo
como a la nada.